- América descendió a Rayos en el C2009
- En torneo regular, Necaxa no gana de visita al América desde el Invierno 99
El último juego disputado entre América y Necaxa en Primera División trae recuerdos de gran tristeza para los aficionados de Rayos, ya que significó el último en el Máximo Circuito para los de Aguascalientes en el Clausura 2009.
En aquella ocasión, América ganó 1-0 y con ello mató cualquier esperanza de Necaxa de sobrevivir, afortunadamente para su causa, los rojiblancos sólo pasaron un año en la Liga de Ascenso, donde arrasaron para regresar a Primera División.
En el ambiente de este encuentro, siempre estará presente el morbo al tratarse de dos equipos que pertenecen a la misma empresa, así que la lucha de Caín contra Abel ha vuelto.
Los triunfos de Necaxa sobre América en el Azteca, en calidad de visitante, ya tienen algunos ayeres, pues en torneo regular la última vez que doblegaron a las Águilas fue en el Invierno 99, mientras en Liguilla desde el Verano 2002 no ganan en el Coloso.
Ahora con América en el Cuerpo Técnico estarán dos hombres que hicieron de Necaxa un equipo triunfador en los 90, donde ganaron prácticamente todo: Manuel Lapuente y Alex Aguinaga, pero ahora, como el discurso lo indica, se deben a las Águilas y buscarán derrotar a los Rayos.
AMÉRICA
Con dificultades, sin convencer ni a su propia afición, las Águilas consiguieron el que apenas fue el segundo triunfo del torneo ante Querétaro en calidad de visita, una victoria por la mínima diferencia que en varias ocasiones estuvieron a punto de perder, de no ser por la mala puntería de Gallos, el duelo hubiera terminado igualado.
Más allá de los pretextos y excusas que Manuel Lapuente puso tras el partido en la Corregidora, que si el pasto estaba crecido 20 centímetros, que por ello su equipo no pudo ser dinámico, la realidad es que América no ha encontrado todavía la conjunción y ha dependido de individualidades y chispazos colectivos, como fue el gol de Daniel Montenegro que les dio el triunfo.
Ante Rayos, América tendrá la ocasión de demostrar sus avances en el juego de conjunto, de mostrarle a su gente que es un equipo capaz de abrir cerrojos defensivos como el que seguramente impondrá el rival, y de que sus delanteros luzcan frente a la portería.
En aquella ocasión, América ganó 1-0 y con ello mató cualquier esperanza de Necaxa de sobrevivir, afortunadamente para su causa, los rojiblancos sólo pasaron un año en la Liga de Ascenso, donde arrasaron para regresar a Primera División.
En el ambiente de este encuentro, siempre estará presente el morbo al tratarse de dos equipos que pertenecen a la misma empresa, así que la lucha de Caín contra Abel ha vuelto.
Los triunfos de Necaxa sobre América en el Azteca, en calidad de visitante, ya tienen algunos ayeres, pues en torneo regular la última vez que doblegaron a las Águilas fue en el Invierno 99, mientras en Liguilla desde el Verano 2002 no ganan en el Coloso.
Ahora con América en el Cuerpo Técnico estarán dos hombres que hicieron de Necaxa un equipo triunfador en los 90, donde ganaron prácticamente todo: Manuel Lapuente y Alex Aguinaga, pero ahora, como el discurso lo indica, se deben a las Águilas y buscarán derrotar a los Rayos.
AMÉRICA
Con dificultades, sin convencer ni a su propia afición, las Águilas consiguieron el que apenas fue el segundo triunfo del torneo ante Querétaro en calidad de visita, una victoria por la mínima diferencia que en varias ocasiones estuvieron a punto de perder, de no ser por la mala puntería de Gallos, el duelo hubiera terminado igualado.
Más allá de los pretextos y excusas que Manuel Lapuente puso tras el partido en la Corregidora, que si el pasto estaba crecido 20 centímetros, que por ello su equipo no pudo ser dinámico, la realidad es que América no ha encontrado todavía la conjunción y ha dependido de individualidades y chispazos colectivos, como fue el gol de Daniel Montenegro que les dio el triunfo.
Ante Rayos, América tendrá la ocasión de demostrar sus avances en el juego de conjunto, de mostrarle a su gente que es un equipo capaz de abrir cerrojos defensivos como el que seguramente impondrá el rival, y de que sus delanteros luzcan frente a la portería.
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NECAXA
Los Rayos siguen con los altibajos desde inicio de torneo, la jornada pasada cayeron en Morelia y suman sólo un triunfo en lo que va de la liga, más dos empates y aunque las actuaciones no fueron desastrozas, ni fueron superados ampliamente por los rivales, es momento de hilar una seguidilla de duelos sin perder.
El conjunto dirigido por Omar Arellano tiene que comenzar a hacer fuerte de visita y sumar más puntos, si bien la única victoria que obtuvieron fue fuera de casa, ahora es cuando deben volver a la senda del triunfo o la desconfianza comenzará a aparecer en la institución rojiblanca, que ahora tienen sólo 5 puntos de 15 posibles.
Históricamente se ha dicho que los jugadores de Necaxa le juegan a muerte al América porque, aunque pertenecen a la misma empresa, hay notables diferencias; además, está el antecedente de que fue el hermano mayor el que le cortó cualquier esperanza de vida rojiblanca en el Clausura 2009, cuando los derrotó por la mínima diferencia en la última fecha y con ello los hundió en la Liga de Ascenso.
El conjunto dirigido por Omar Arellano tiene que comenzar a hacer fuerte de visita y sumar más puntos, si bien la única victoria que obtuvieron fue fuera de casa, ahora es cuando deben volver a la senda del triunfo o la desconfianza comenzará a aparecer en la institución rojiblanca, que ahora tienen sólo 5 puntos de 15 posibles.
Históricamente se ha dicho que los jugadores de Necaxa le juegan a muerte al América porque, aunque pertenecen a la misma empresa, hay notables diferencias; además, está el antecedente de que fue el hermano mayor el que le cortó cualquier esperanza de vida rojiblanca en el Clausura 2009, cuando los derrotó por la mínima diferencia en la última fecha y con ello los hundió en la Liga de Ascenso.
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EL PARTIDO
América será el obligado a tener la pelota, a atacar al rival, a marcar el ritmo del encuentro porque está en casa y por la calidad de sus jugadores, sin embargo, ya quedó demostrado que los rivales que lo visitan en el Azteca pueden causarle más de un dolor de cabeza al contragolpe, así que la contundencia será fundamental para este partido.
